jueves, 2 de abril de 2009

DE QUÉ VA ESTE BLOG

"Historias de Paté de Avo", nace con vocación de libro. En cierto modo auto-biográfico, pero sólo en cierto modo, porque no voy a ser capaz, -y tampoco es mi intención-, de narrar mi vida. Tampoco creo que sea tan interesante como para justificar que dedique a ello mi tiempo, y mucho menos que nadie malgaste el suyo en leerme. Sin embargo, claro que hay un motivo: hay tantas cosas que no recuerdo haber hecho!, tantas que no se si he vivido o simplemente he pasado por ellas sin más. No me refiero a todos esos desplazamientos en transporte público, a esas idas y venidas del trabajo a casa y viceversa, a esas conversaciones de trabajo, de sobremesa, incluso todos esos primeros y segundos platos que debo haber comido mientras leía, en el bar al que acostumbro a ir cada día. Tampoco a esos centenares de excursiones, de ascensiones de escaladas; tantas caídas, dolores, enfermedades; tantas risas, tantas canciones. Tantos besos sin pasión, y tan pocos apasionados. No, no me refiero a esas que son nuestra vida real, la de cada día, me preocupa sobretodo, haber olvidado algunas que sin saber como ni porqué, acaban siendo importantes, se transforman en una vida imaginaria y dan contenido a los recuerdos por los que sabemos que sí hemos vivido. Historias de Paté de Avo, nace de mi necesidad de recordar que he vivido, y no porque me sienta muerto o medio muerto, sino porque aún vivo y quiero saber quién soy.
En este blog encontrareis narraciones, algunas más veraces que otras, pero todas ciertas, sin que ello sea una contradicción. Tan ciertas como yo las recuerdo, tan falsas como haga falta para expresar lo que para mi representan, en realidad lo que han acabado siendo en mi memoria dando forma a mi vida.
No va a ser fácil, ya de principio resulta que soy bilingüe, como tantos otros, y que mis recuerdos y mi vida ha sido bilingüe desde que nací. Por eso, las narraciones también lo serán, porque hay personas que para mi no pueden ser en otro idioma que el que hablo con ellas. Aún más, las hay con las que hablo en una o otra lengua según de qué estemos conversando o según lo que estemos haciendo. Eso no significa que todo deba ser escrito de una u otra forma, solamente que cuando no pueda ser de otra manera, será. Si es indiferente narrar en uno u otro idioma, entonces como ahora mismo, será en castellano.
Ya se que esto no os agradará a muchos, pero resulta que el libro está por escribir todavía, y que mi intención es escribirlo aquí y ahora. Por eso debe crecer tal como es, para que no acabe deformado por querer explicar sentimientos, emociones y sensaciones en una lengua que no los ha sentido.